Mes y medio encerrados y encerradas en nuestro país. Semana Santa suspendida, San Fermín suspendido, ferias aplazadas, festivales suspendidos... Calles muertas, ventanas y terrazas llenas de vida. Algunas calles dominadas por animales y repletas de basura. ¿Cómo es posible que las calles estén tan sucias si estamos en casa? Eso me pregunto todos los días que salgo a pasear a mi perro. ¡Y cómo impacta ver a personas con mascarilla por la calle! Me encanta ver en las noticias y en los vídeos que difunde la gente que los animales están a sus anchas en cualquier sitio, disfrutando de lo que estábamos invadiéndoles. Desde que estamos en casa hay menos contaminación y, por supuesto, menos contagios del virus. Por otra parte, echo de menos a mi gente: a mi primo, a mi prima, a mis amigos, a mis amigas y a mi abuela. Hasta echo de menos a alguien que nunca imaginaba. También tengo ganas de perrear hasta el suelo 'Safaera' de Bad Bunny, pero hasta final de año no será posible. Eso sí, lo primero que haré cuando podamos salir al exterior será ir a abrazar a mi mejor amiga, que vive a dos calles de mí. Hay quienes piensan que, tras este acontecimiento, nos haremos mejores personas. Yo sinceramente pienso que no, que quien es buena persona es porque es así desde que nació.